Nada que no hayas escuchado. Londres es todo lo que dice la gente. Es musical, es activa, respira, te emociona, te excita. Londres es todo lo que querés de una ciudad. Te enamora y te pierde. Te atrapa y hace que cuando te fuiste sueñes con ella, porque NUNCA vas a conocer otro lugar así.
¡Y pensar que era uno de los lugares que menos quería conocer! Y acá estoy, sufriendo por ese hechizo que me tiro en el momento que pise su tierra. Necesito volver. Lo necesito porque no la disfrute como la debería haber disfrutado, porque no pensé que la iba a extrañar tanto. Su gente es amable, sus calles limpias, historia por todos los rincones, diversidad de pueblos y culturas. Es el ZAMBA de las ciudades. Me veras volver…
Siempre hay que volver a Londres, es la ciudad cosmopolita numero uno (al menos para mi) que ofrece mil y un cosas para ver, para hacer, para sentir. No importa cuantas veces vayas, siempre tendras una excusa para volver y hacer cosas que quedaron pendientes. Y las actividades que ofrece son para todos los gustos, para adultos, niños y no tan niños. Para jóvenes y familias.
Tanto paseos de compras como caminatas por parques o por barrios singulares, por sus mercados o por sus atracciones turísticas típicas por sus hitos históricos. También encontraras un sin fin de actividades excéntricas o «no típicas» que no podrás encontrar en ningún lugar del mundo: caminar por arriba del estadio O2, visitar el meridiano de Greenwich o subir a los rascacielos mas emblemáticos de la ciudad.
Si algún día podes ir, te recomiendo que armes una buena agenda. Una que te permita hacer las actividades típicas de un turista con todos los sitios históricos, pero también la que te proponga una nueva aventura cada día. Londres es una sorpresa constante.
